lunes, 5 de noviembre de 2012

'El dulce sabor de la pólvora'

Comenzaba a amanecer de forma tímida entre la poca luz que aquellas paredes de grueso cemento y esas rejas que reflejaban sombras sobre el frío y húmedo suelo donde estaba sentado. Triste. Apagado. Casi sin aliento. Cada vez entraba más luz. Luz cegadora, luz penetrante, luz que impedía pensar con claridad. Aunque la claridad en sus ideas rebosaba.
Sangre fría. Sudor. Manos temblorosas. El tacto de la áspera almohada que reposaba sobre ese lecho al que llamaban cama y en el que no se podía descansar. El descanso sin libertad. Sólo había una salida y no era por su propio pie.
Ahí estaba ella. Fría. Dura. La que marcaba el final.
Las manos temblorosas, la mirada perdida, la mente en blanco, ideas vacías, un único objetivo.
El sabor de aquel objeto no estaba mal, metal con sabor a adiós, a nunca más, a para siempre, para toda la eternidad. El tacto de ese gatillo era tan apetecible que no dudó ni un momento en presionarlo. Silencio.
El sabor de la pólvora no esta nada mal, para ser el sabor del final.

martes, 25 de septiembre de 2012

Sin darnos cuenta.

El problema empieza cuando te das cuenta de que dependes completa y absolutamente de una persona, de un ser imperfecto, al igual que tú, pero que roza la perfección con cada uno de sus gestos, cada una de sus palabras, miradas o hasta parpadeos. Que te demuestra que es imperfecto, ya que tropieza, al igual que tú, pero que se levanta, y, sobre todo, que se levanta porque tú le tiendes la mano y esas imperfecciones te encantan, mueres por ellas, porque ya dependes de él como del respirar, como del sentirte bien, el sonreir, porque todo te lo da él.
Aunque, en realidad, llamarlo problema es un error. Solo puede convertirse en un problema cuando te falta el calor de esa persona, te faltan sus sonrisas, sus besos, sus abrazos y hasta su aliento a milímetros de ti. Pero piensas que ese problema tendrá fin, que llegará el día en el que le volverás a abrazar, y lo harás como nunca, y no querrás separarte más de él. Pero teniendole delante, no se puede llamar problema. Ya que algo que está lleno de sonrisas inocentes, como si de niños se tratase, nunca puede ser un problema.
El problema empieza cuando ves que estás jodido. Jodidamente enamorado.

lunes, 16 de julio de 2012

"Fue el amor de mi vida..."

- ¿Quién es Didi?
- Joder... Fue una... Una chica que conocí en la marina... Fue... Fue el amor de mi vida, ¿vale? 
- ¿Y nunca me has hablado de ella?
- No es algo que uno comparte con sus hijos... Es más, te tengo a tí y a Annie, y no me arrepiento.
- Cuéntamelo.
- Fue el amor de mi vida, yo fui un estúpido y no me di cuenta y la perdí por algo tan tonto que ya ni me acuerdo. Nunca he dejado de quererla, tal vez sea una de las razones por las que se fue tu madre... Mis amigos me decían que cuando Didi y yo nos mirábamos ¡saltaban chispas! jajajaja Y la dejé escapar.... ¡La dejé escapar porque tenía demasiado orgullo para decirle lo que sentía por ella! Ojala lo hubiera sabido cuando tenía tu edad...
Sé que estás harto de oír que la vida es corta, pero deja que te diga algo... Lo que esto me ha enseñado es que la vida es corta de verdad y no hay que malgastar ¡ni un minuto! Perdona... Lo siento...
- La chica que llevé a casa a los Ángeles...
- Sí, ¿qué pasa con ella?
- La he fastidiado... 
- Arréglalo.
- No puedo, ¡No me habla!
- Tal vez te escuche. Siempre hay una manera. Si tu crees que ella puede ser el amor de tu vida, arreglalo. 

jueves, 31 de mayo de 2012

Siempre buscando una etiqueta.

Supongo que por más que lo intento veo que no encajo en ningún grupo de gente. Ni soy adicta a Harry Potter, ni a Lady Gaga, ni a LJDH, ni a Crepúsculo, ni a GH, ni a nada. Voy dando tumbos entre la multitud para ver donde hay un hueco para mi, pero no lo encuentro, así que puedo verlo todo desde fuera.
Al verlo todo desde mi punto de vista objetivo, veo que la mayoría no sabéis respetar los gustos de los demás, pero tampoco queréis que tengan todos los mismos gustos que vosotros, porque luego se les tacha de que lo hacen por moda. Ni vosotros mismos sabeis lo que quereis. A mi, por ejemplo, no me cae bien o mal una persona dependiendo de sus gustos; puede que escuche Lady Gaga, Bajo Mínimos,  30STM o Daddy Yankee que a mi lo que me va a caer bien es su forma de ser, no la musica que escucha. Ni tampoco los libros que lea, ni las películas que ve.
Pero esto es como todo, "no hay peor ciego que el que no quiere ver" y todo esto no lo veis, hasta que no os tachen de 'Muggle', 'inculto musical' o simplemente que ni te hablen porque no tienes los mismos gustos que ellos. Pero de lo que estoy segura, es de que no hace falta ninguna etiqueta para pertener a algún grupo, a mi con pertenecer al grupo de las personas, me sobra.

miércoles, 23 de mayo de 2012

Un simple segundo.

¿Alguna vez os habéis parado a pensar lo que puede repercutir en vuestro futuro un simple segundo, una simple acción que parece insignificante, un simple parpadeo, un simple paso en falso puede hacer que cambie tu vida por completo?
Vas andando por la calle con tu música, tus pensamientos y tus recuerdos en la cabeza, si giras hacia la izquierda puede que tu vida sea totalmente distinta si lo haces hacia la derecha. No sabes que va a pasar, no sabes con quien te vas a encontrar, ni quien se va a cruzar en tu camino. No sabes si vas a parar de escuchar esa música, para escuchar el sonido de un simple tren pasando a tu lado, ni si esos recuerdos van a pasar a ser sueños, o simplemente pases a no pensar en nada, a tener la mente en blanco. Nunca contamos con ese pequeño detalle. Nunca contamos con que hace una semana, hace un mes, o hasta hace simplemente una hora hemos hecho cosas, no hemos hecho otras tantas y gracias a eso nuestro futuro será de una manera o de otra. Puede que ahora mismo salgas a la calle y te atropelle un camión y tu futuro acabará ahí, o puede que vayas a cruzar la calle y a tu lado se ponga la persona que te va a acompañar el resto de tu vida, porque ahí estará el amor de tu vida. No lo sabes, no sabes nada de lo que va a pasar. Solo sabrás cuando pase.
De todo esto solo puedes aprender una cosa: "Cada segundo es importante. Dale la importancia que se merece."

sábado, 21 de abril de 2012

Vive. Ya veremos luego.

Vivir sin preocupaciones, aprendiendo a cada paso, cada piedra, cada tropezón. Analizando, imaginando sin dejar de vivir por un segundo. No son clases, ni lemas, ni teorías, son formas de vivirlo, de sentir y actuar. Nunca te arrepientas, ten en cuenta los errores, pero sonríe, que engorden las virtudes, los buenos momentos, las sonrisas... Anorexicos se queden los problemas, odios, malos rollos, el insomnio por las lagrimas y el nudo en la garganta.
No quiero acelerar los segundos, ni alargar las horas, quiero vivir el minuto en sus multiples formas.
Si el mundo te queda grande, de repente, no te hundas, saca pecho, espalda recta, cabeza mirando al cielo y a seguir pa'lante, coño, que problemas tenemos todos, pero yo tengo bíceps, ellos no, yo soy más fuerte.

jueves, 29 de marzo de 2012

Te cuento.

Eh, perdona. Creo que vas a ser tú el que sufra mi plan secreto.
Veamos, te cuento:
Voy a secuestrarte. Te sonreiré para cautivarte, no podrás escaparte. Pues, procedo. Hola, vengo a llevarte a otro planeta, por mi, como si es Marte. Quiero agotarte y que vuelvas a demostrarme tu arte, por la parte que te toca, la de mirarme, tocarme y yo besarte. ¿Lo sientes? No creo. Solo son palabras, pero sinceras, pero por ello efímeras y traicioneras. Que las palabras se las lleva el viento, recuerda. Pero son palabras que no quedarán en un simple cero. Yo quiero un ocho, como mínimo, pero tumbado. ¿Lo entiendes? Es infinito. No creo, solo es el principio.