jueves, 31 de mayo de 2012

Siempre buscando una etiqueta.

Supongo que por más que lo intento veo que no encajo en ningún grupo de gente. Ni soy adicta a Harry Potter, ni a Lady Gaga, ni a LJDH, ni a Crepúsculo, ni a GH, ni a nada. Voy dando tumbos entre la multitud para ver donde hay un hueco para mi, pero no lo encuentro, así que puedo verlo todo desde fuera.
Al verlo todo desde mi punto de vista objetivo, veo que la mayoría no sabéis respetar los gustos de los demás, pero tampoco queréis que tengan todos los mismos gustos que vosotros, porque luego se les tacha de que lo hacen por moda. Ni vosotros mismos sabeis lo que quereis. A mi, por ejemplo, no me cae bien o mal una persona dependiendo de sus gustos; puede que escuche Lady Gaga, Bajo Mínimos,  30STM o Daddy Yankee que a mi lo que me va a caer bien es su forma de ser, no la musica que escucha. Ni tampoco los libros que lea, ni las películas que ve.
Pero esto es como todo, "no hay peor ciego que el que no quiere ver" y todo esto no lo veis, hasta que no os tachen de 'Muggle', 'inculto musical' o simplemente que ni te hablen porque no tienes los mismos gustos que ellos. Pero de lo que estoy segura, es de que no hace falta ninguna etiqueta para pertener a algún grupo, a mi con pertenecer al grupo de las personas, me sobra.

miércoles, 23 de mayo de 2012

Un simple segundo.

¿Alguna vez os habéis parado a pensar lo que puede repercutir en vuestro futuro un simple segundo, una simple acción que parece insignificante, un simple parpadeo, un simple paso en falso puede hacer que cambie tu vida por completo?
Vas andando por la calle con tu música, tus pensamientos y tus recuerdos en la cabeza, si giras hacia la izquierda puede que tu vida sea totalmente distinta si lo haces hacia la derecha. No sabes que va a pasar, no sabes con quien te vas a encontrar, ni quien se va a cruzar en tu camino. No sabes si vas a parar de escuchar esa música, para escuchar el sonido de un simple tren pasando a tu lado, ni si esos recuerdos van a pasar a ser sueños, o simplemente pases a no pensar en nada, a tener la mente en blanco. Nunca contamos con ese pequeño detalle. Nunca contamos con que hace una semana, hace un mes, o hasta hace simplemente una hora hemos hecho cosas, no hemos hecho otras tantas y gracias a eso nuestro futuro será de una manera o de otra. Puede que ahora mismo salgas a la calle y te atropelle un camión y tu futuro acabará ahí, o puede que vayas a cruzar la calle y a tu lado se ponga la persona que te va a acompañar el resto de tu vida, porque ahí estará el amor de tu vida. No lo sabes, no sabes nada de lo que va a pasar. Solo sabrás cuando pase.
De todo esto solo puedes aprender una cosa: "Cada segundo es importante. Dale la importancia que se merece."